En el maravilloso mundo de la literatura infantil, hay un autor en particular que se destaca por su habilidad para cautivar a los niños con sus relatos: PK Hallinan. Este talentoso escritor ha logrado conquistar el corazón de miles de pequeños lectores alrededor del mundo, gracias a sus historias llenas de imaginación y su increíble capacidad para dar vida a personajes entrañables. En esta ocasión, exploraremos la fascinante conexión entre PK Hallinan y los niños amantes de la escritura, descubriendo cómo su trabajo inspira a los jóvenes a explorar su creatividad y dar rienda suelta a sus propias historias. ¡Sumérgete en este reino literario y acompáñanos en este apasionante viaje junto a PK Hallinan y los niños ávidos de palabras!
Tengo algunas ideas sobre cómo ayudar a los niños a amar la escritura…
1) Fomentar la lectura: Primero tienes que conseguir que disfrute de la lectura. Esto no suele ser fácil, especialmente para alguien como yo, que lee muy despacio. Lo más importante es tener paciencia con el joven lector y animarle a disfrutar el proceso, sin importar cuánto tiempo lleve. Cuando alguien empieza a disfrutar de la lectura, a menudo pasa sin problemas a querer escribir.
2) Fomentar la creatividad: En la escuela secundaria, tomé una clase de escritura creativa que realmente me inspiró porque me mostró cuán amplio puede ser el tema de la escritura. Nos dieron la tarea de escribir una historia basada en un color específico: elegí el naranja y escribí una pequeña y bonita historia sobre el viaje de Maryland a Georgia, con todas las “naranjas” a lo largo del camino. En resumen: déle a su hijo la libertad de escribir sobre cualquier cosa, sin importar cuán pequeño sea el alcance.
3) Sea usted mismo un lector y escritor: Es casi imposible lograr que un niño haga algo que usted mismo no le “modele”. Tengo recuerdos muy fuertes de mi padre sentado en su silla y leyendo. Creo que esta pequeña “instantánea” ha tenido un impacto en mí para toda la vida.
4) Aprender y utilizar el inglés adecuado.: El mayor problema que encuentro con los manuscritos que leo es la gramática y la ortografía. Aunque esto no es importante al principio, se vuelve muy importante más adelante. Mis padres trabajaron conmigo en mi gramática y noté cómo hablaban los presentadores de noticias en la televisión. Realmente me ayudó cuando finalmente me convertí en escritor profesional.